Este plato irresistible se cocina entre 3 y 4 horas al horno, permitiendo que los sabores se mezclen en una deliciosa salsa casera. Acompañado de papas con perejil y ajo, cada bocado es una explosión de sabor auténtico argentino.
Ideal para compartir en familia o con amigos, esta opción no solo es abundante, sino también nutritiva. No te pierdas la oportunidad de disfrutar de esta joya culinaria en tu mesa.